BRUJA 1.– Silencio, hermanas, va a comenzar nuestra ceremonia. Bebamos
el brebaje y untémonos con nuestras pomadas hechas con los elixires de la
naturaleza y hagamos las ofrendas acostumbradas. Silencio, hermanas, invoquemos
con toda el alma a nuestro amo y comencemos a brindar por la salud de las
estrellas.
BRUJA 2.– Levanto mi copa por la fértil luna, equívoca y obediente,
caprichosa reina de la noche. (Bebe).
BRUJA 3.– Por el alado Mercurio, el mensajero secreto del Demiurgo del
mundo. (Bebe).
BRUJA 4.– Brindo por la tersura del amor. Por la juventud sin barreras.
Por la unión orgiástica con el cosmos invisible. (Bebe).
BRUJA 1.– Por el bendito sol de cada día y por la belleza y la majestad
radiante del macho cabrío. (Bebe).
BRUJA 5.– Por la fuerza marcial del rigor y el carácter indomable del
rito. ¡Acude a vengarnos, dios de la guerra!. (Bebe).
BRUJA 6.– Bebo en homenaje al señor más dulce y comprensivo, a la salud
de nuestro padre arquetípico. Venga a nosotros la magia del verbo y la
transformación del amor. (Bebe).
BRUJA 7.– A tí, melancólico antiguo, que permanentemente recuerdas la
memoria del mundo. (Bebe).
BRUJA 8.– ¡Y a ti, Calodemon, príncipe de príncipes, que reúnes toda la
potencia de los planetas!
Fragmento de "Noche de Brujas" obra teatral de Federico González Frías
En la imagen yo misma durante la representación de la obra, en este caso bajo la bóveda celeste, acompañada de brujas medievales.
"Levanto mi copa por la fértil Luna, equivoca y obediente, caprichosa reina de la noche" (Foto: Mª Ángeles Díaz durante su actuación en "Noche de Brujas", de Federico González Frías
Leer la obra completa en la web. del autor. Obra en la representé, como se ve arriba, el papel de una de la brujas. Otras hermanas Adara, Mariví, Margherita, y Margarita
Durante la grabación del Vídeo titulado: "El Teatro Hermético de la Memoria de Federico González", en nuestra cadena de Vídeo-Arte Documental @lamemoriadecalíope
Noche de San Juan 2022
Noche de Brujas. Las brujas o lobas iluminan el
camino con sus antorchas y hacen hogueras entorno a las cuales llevan a cabo sus ritos ancestrales, poderosos, los que conducen a los participantes a un lugar secreto. Nadie sabe.
Federico González Frías inaugurando el Teatro de Cámara (2012) de Qyuen son estas palabras:
"Unicamente la solidaridad y una unión monolítica puede hacer que nuestros esfuerzos no sean en vano y se potencialicen".
Con Federico González en la Sala González Frías
Otros escenarios compartidos. Mª Ángeles Díaz y Francisco Ariza junto a Federico González (a la derecha).
Cuentan que
fue durante el reinado del rey Cécrope cuando se sostuvo una lucha que
enfrentaba a Atenea con Poseidón, pues ambos pretendían ser la deidad que
imperase en Atenas. Es por ello que en algunas versiones sobre su vida, Cécrope
aparece como árbitro, o juez, en la contienda por las tierras del Ática, siendo
este rey quien resolvió finalmente la situación con su laudo: que cada uno de
los dioses propusiera lo mejor y más beneficioso para los ciudadanos. Tras lo
cual él decidiría.
Poseidón
entonces abrió con su tridente un manantial de agua cristalina en la Acrópolis,
mientras que Atenea, por su parte, plantó un olivo. Cécrope consideró dicho
cultivo más útil a los ciudadanos, por lo cual adjudicó la protección de la ciudad
a Atenea dándole su nombre y realizando en ella la primera estatua de esta
diosa.
Y como la
historia mítica no se corresponde con una ensoñación, sino con una realidad
tanto histórica como suprahistórica, sucedió que esa lucha entre los dioses del
mar y de la tierra se vio reflejada en la retirada del Mediterráneo de las
costas atenienses. Efectivamente, las aguas del mar que hasta entonces llegaban
prácticamente hasta la altura del monte donde se halla el santuario de Delfos,
como sabemos, se encuentra actualmente bastante retirado de la costa, separado
de ella por las montañas.
Atenea está
asociada a la Sabiduría y la Inteligencia activa, esa energía que nos capacita
para romper los límites de nuestra pequeñez humana y trascender al amplio mundo
de las ideas arquetípicas. Atenea es la contraparte del dios Marte, una diosa
guerrera y siempre armada de las Ciencias y las Artes en las que apoya su acción
bélica contra todo aquello que impide al alma humana desprenderse de sus adherencias
e ilusiones y alcanzar la realidad metafísica y la revelación de que todo está
en todo, es decir, de descubrir la posibilidad de la autogeneración de la
deidad en nosotros, lo cual es un descubrimiento que para algunos supone la renovación
del mundo y de su circunstancia en él.
Mª Ángeles Díaz, de mi libro: Viaje Mágico Hermético a Andros. Una Aventura Intelectual. Ed. Symbolos
Imagen: Atenea. Serie "Teatro Hermético de la Memoria" Nº 59, inspirada en el teatro de Federico González Frías del que formamos parte.
Un juego de seis
tapices de manufactura flamenca datados entre 1484 y 1500, tejidos para el
caballero Jean de Viste, se alojan en la Abadía de Cluny, convertida desde
antiguo en Museo, y lo hace bajo el título de "La Dama del
Unicornio".
En efecto, en todos
ellos hay una bella dama en una pequeña isla entre un unicornio y un león y
rodeada de animales, flores y los emblemas, estandartes y armas e insignias de la simbólica de la Caballería.Y en los que destaca
la verticalidad de los distintos elementos que conforman el conjunto.
Están realizados en cartonajes, con hilos de lana y seda sobre un fondo bermellón y gran profusión
de animales, plantas, vegetación y muchas flores (un estilo propio de Flandes
que se conoce como "mil flores"). Cinco de los tapices están referidos a los sentidos (Vista, Oido, Olfato,
Gusto y Tacto).
En el sexto, en
torno a la corona de una preciosa tienda que asemeja el manto de la Virgen que
todo lo cobija, aparece una enigmática leyenda que dice: Mon seul desir.
Federico González Frías
cita en su Diccionario de Símbolos y Temas Misteriosos esta tapicería, y lo hace precisamente para
hablarnos del simbolismo del Unicornio
"un caballo blanco con pezuñas divididas y barba de
cabra, con un cuerno frontal impelido hacia arriba y que toma forma espiral,
tal cual se lo puede observar en el famoso tapiz que lo representa, depositado
en la abadía de Cluny.
En la iconografía cristiana indica curiosamente a la Virgen
fecundada por el rayo del espíritu, por eso se los vincula en muchas
representaciones. En todo caso siempre está relacionado con el rayo que toca a
los hombres para despertarlos, al mismo tiempo que simboliza un arma de
defensa. Posteriormente esta criatura imaginaria ha sido el protagonista de numerosos
escritos y leyendas que han dado lugar a múltiples obras de arte relacionadas
con los contenidos de la psiqué. En China fue durante un periodo el emblema
real y en Inglaterra forma parte –con el león– del escudo del monarca británico".
Con los que siguen se completa una muestra de toda la serie que compone esta rica tapicería.
A continuación os invito a ver un documental de 7 minutos con imágenes de los tapices, acompañadas de una pieza musical preciosa de Domenico da Piacenza, pitagórico y maestro de danza en la Corte de Ferrara. http://youtu.be/D_lqovHeE00?list=UUnMHp9YxoxnrYdO8t-x_Acg
A todos los amigos y conocidos con los que hemos compartido este año difícil, os quiero agradecer que estéis ahí, y deseo que el 2022 podamos seguir manteniendo un diálogo fructífero que nos permita elevarnos por encima de los límites terrestres y, como Dante, emprender el viaje hacia nuestra estrella interior.
Segundo Episodio de la Serie (Texto, Vídeo y Podcast)
La imagen que del mito de Penélope nos
hemos forjado procede de la poesía épica de Homero quien nos la describe como una
fiel y leal esposa que durante los cuatro lustros que duró la ausencia de
Ulises (Odiseo) por causa de la guerra de Troya se mantuvo firme a la espera
del regreso del esposo, siendo capaz de mantener su matrimonio y su hacienda
con gran astucia empleándose en el ardid de “tejer y destejer” una prenda para
continuar eludiendo a sus pretendientes y a los que creyéndola ya viuda tenían sobre
ella derecho de rescate, es decir derecho a reclamar las posesiones de un
difunto por vía matrimonial, y a permanecer en la hacienda que reclamaban hasta
recibir una respuesta de la viuda. Penélope, sin embargo, que nunca aceptó que
Ulises estuviera muerto a pesar de los años de ausencia, consiguió mantener a
sus pretendientes en permanente espera prometiendo que elegiría como marido a
uno de ellos cuando terminara su labor en el telar, una labor que realizaba de
día y deshacía de noche. Y es que Penélope nunca perdió la esperanza de que
Ulises, su esposo, hijo de Laerte, rey de la isla de Ítaca y padre de su hijo
Telémaco, estuviera vivo y que algún día regresaría de aquel viaje que
emprendió con destino a Troya para participar en la tan famosa contienda con la
que los griegos vengaron la afrenta hecha por Paris a Menelao, rey de Esparta
micénica, robándole a su esposa Helena.
Homero nos muestra con este mito de Penélope,
la que deshace de noche lo que construye de día, vestigios de la era matriarcal
de nuestra civilización y de los ritos ctonicos de la Diosa Madre, Deméter, la que
da la vida y la quita. Hace y deshace para mantener el equilibrio. En este
sentido el símbolo de Penélope guarda relación con el mito de Ocnos, el soguero
que trenza una soga afanosamente sin reparar en que su asna está, en el otro
extremo, comiéndose su labor.
Para Plutarco este símbolo indica la
incapacidad que tienen algunos para entrelazar el presente con el pasado. Ortega
y Gaset, quien llama a Penélope la “Tejedora conyugal”, siguiendo los estudios de J. J. Bachofen, sintetiza brillantemente
este mito en su ensayo titulado justamente “Oknos. El soguero[1]”
donde escribe:
“Lo que Oknos laborioso trenza, el
asna lo va anulando. Representa este animal el poder destructor necesario al
ritmo de la Gran Madre. Una creación lograda y perfecta detendría el proceso:
es menester que colabore la potencia enemiga, la energía destructora. El trozo
de soga que hay entre las manos del soguero y el belfo de la bestia es breve
jornada de la existencia que se abre entre el poder de hacer y el de deshacer,
ambos eviternos. (…) La esposa de Ulises desteje cada noche lo tejido durante
el día para que la tarea sea perdurable. Penélope es una última
modulación del mito ctónico: también ella estaba quieta e hilando”
Ocnos el Soguero
El mito de Penélope nos muestra la
pervivencia de la cultura matriarcal, cultura hembra, lunar, telúrica con
dioses subterráneos, que va al encuentro de un ciclo nuevo, solar y luminoso
representado por dioses como Apolo o Zeus. Lo que salva esta tejedora conyugal con
su fidelidad, simboliza el abrazo amoroso entre dos culturas opuestas, una
femenina, cuyo ciclo se extinguía, y otra masculina que nacía fulgurante con
todos los dioses solares.
La narración con la que Homero viste
este mito da cuenta que una vez conseguida la victoria y arrasada Troya no todos
los supervivientes regresaron a sus patrias, sino que algunos perecieron en el
camino al hundirse sus naves o ser atrapados en corrientes tenebrosas. Otros,
caso de Ulises, extraviaron el rumbo de vuelta a Ítaca permaneciendo durante
diez años perdido en desconocidas islas y procelosas aguas.
Son varias las mujeres del relato de
la Ilíada y la Odisea que detestaban a Helena y Paris, es el caso de Penélope,
pues por causa de la infidelidad de ambos ellas sufren la ausencia de sus
compañeros teniendo que dejar por años su vida en suspenso.
Penélope, prima de Helena de Troya, era
hija de una ninfa náyade y del rey Ícaro, de Esparta micénica, una “mujer
irreprochable”, nos dice Homero, que durante esa larga ausencia perseveró con
firmeza y lealtad matrimonial esperando que Ulises al fin volviera o que
alguien le diera cuentas de él. Por eso iba todos los días al encuentro de los
barcos que llegaban a sus costas para preguntar a los tripulantes si alguien
podía darle alguna noticia de Ulises. Así supo de sus valerosas hazañas y
también pudo comprobar que nadie lo había visto muerto lo cual aumentaba su
esperanza. De ahí que cada vez que una nave zarpaba, ella entregaba a la
tripulación una carta para Ulises, solicitando que si en algún momento alguien
lo encontraba ésta le fuera entregada. Una de esas misivas es la que nos ofrece
Ovidio y que a continuación nosotros extractamos. En ella Penélope cuenta, desde su propia perspectiva, lo
que para ella supuso la guerra de Troya lamentándose de que Paris no hubiese
muerto antes de provocar tantas desgracias. Y es evidente que
Concluyendo
el mito y la leyenda tradicional no necesitan de invenciones argumentales sino
que, tal y como demuestra Ovidio con su obra original, lo que al rapsoda
corresponde hacer es vivificar y actualizar su mensaje para que su enseñanza
arquetípica siga llegando al corazón de sus contemporáneos. Eso pretendía
Ovidio al poner esta carta a Ulises en el cálamo de su esposa Penélope que en
sus principales párrafos dice así:.
[1]Artículo publicado
originalmente en la Revista de Occidente, 1923
Próximamente PDF del cuaderno en la Bibliotecahermética.com
"Esta carta, Ulises, la envía Penélope a tu tardanza. No me contestes; sino
mejor, ven en persona. (…)
Yace en ruinas Troya, aborrecida, con razón de las mujeres dánaas[1]
(…) ¡Ay! Ojalá entonces, cuando navegaba a Lacedemonia, se hubieran tragado las
enfurecidas aguas al adúltero[2].
No hubiese dormido yo sin tu calor en un lecho vacío (…)
¿Cuándo no he temido yo peligros más graves que los reales? Cosa henchida
de angustiado recelo es el amor. Contra ti me imaginaba que se disponían a
enfrentarse temibles troyanos. Con sólo nombrar a Héctor[3] me ponía lívida (…)
Cualquiera que gira en estas riberas[4] su viajera popa, no se
marcha sin haberle preguntado yo muchas cosas de ti; y para que te la entregue,
si alguna vez te viere, le confío una carta escrita por mi mano. (…) ¿Qué
tierras habitas, en dónde prolongas tu ausencia? (…)
Mi padre Icaro me obliga a abandonar la viudez de mi lecho y censura sin
cesar tu infinita tardanza. ¡Que censure mientras pueda! Tuya soy: que tuya me
llamen todos es menester, Penélope, esposa siempre de Ulises seré. (…)
Y yo no tengo fuerzas para arrojar a los enemigos de mi casa[5].
¡Ven pronto tú, puerto y altar para los tuyos! Tú tienes, y que lo sigas
teniendo pido, un hijo[6],
que en sus tiernos años debía ser educado en las artes de su padre. (…)
Y es cierto que yo, que al marcharte tú era una muchacha, por pronto que
vuelvas, pareceré una anciana".
[1] Dánaos es uno de los
nombres utilizados en la Odisea y en
la Ilíada para identificar a los
griegos. Otro término es aqueos.
[2] Se refiere a Paris, como
se sabe casado con Enone, una ninfa de los ríos.
[3]
Héctor era hermano de Paris y conocido como el “domador de caballos”. Se trata
de uno de los principales personajes del poema homérico de la Ilíada. Fue el comandante que dirigió la
defensa de la ciudad troyana frente a los aqueos, en esa guerra en la que no
estuvo de acuerdo, pues entendía que esa disputa concernía únicamente a Paris
que era quien debía enfrentarse a Menelao. Héctor finalmente murió a manos de
Aquiles.
[4]
Ítaca, pequeña isla griega del mar Jónico perteneciente al grupo de las islas
Jónicas.
[5] Los
pretendientes tenían derecho a permanecer en la casa de Ulises, al que
consideraban difunto, comiendo y bebiendo a la espera de que Penélope se
decidiera por uno de ellos.
[6]
Telémaco, que era un niño pequeño cuando su padre partió para regresar veinte
años después.
" ... He de creer a Platón cuando asegura que
entre los Dioses y los hombres existen ciertos poderes divinos, que les sirven
de intermediarios, por su naturaleza y por el lugar que ocupan, y que tales
poderes rigen todas las manifestaciones de la adivinación y los milagros
realizados por los magos."
Apuleyo: Apología, 43, 2
EL MAGO DEL TAROT Simboliza el principio del viaje iniciático para aquel que se propone hacer de sí mismo la mayor obra de arte, capaz de vivir equilibradamente uniendo lo material al espíritu. 'El Mago' es aquel que libre de prejuicios vive consciente de su papel dentro de la Creación, es decir consciente de ser el cooperador único del Creador, pues tiene en su mano la posibilidad de "perfeccionar la materia imperfecta".
Identificarse con el 'Mago del Tarot' significa haber alcanzado a ver que cada día es el primero y el último de la Creación por lo que todas las posibilidades están siempre contenidas en el presente. M.A.D.
¿Será verdad que siempre existe una salida olvidada?
Como no tener presente aquella enseñanza alquímica donde se dice que,
"Siempre un punto marca la puerta, señala y revela la salida.
Voy a colocarme a la luz y al calor de la pasión contenida, de la
atención concentrada, de la reiteración ritual sucesiva".
Conocer a los antepasados a través de sus libros, muchas veces criptogramáticos, sus biografías misteriosas y a veces hasta oscuras. La idea es ir abriendo puertas en el sendero iniciático. Son maneras de vivir la energía viva del pasado. Una utopía que nos pertenece y que está ligada a nuestro presente por medio de la cadena áurea de testificación.
Fue Federico González Frías quien durante la representación televisiva de la opera de Donizetti, Lucrecia Borgia, me sugirió que investigara en dicho personaje histórico siendo yo la primera en quedar sorprendida por tal sugerencia y más tarde admirada por todo cuanto nos aportó el haber seguido a esta fémina y lo que descubrimos del entorno por el que nos condujo su periplo vital. Para ello hemos contado con el libro de Fernando Gregorovius, escritor del siglo XIX, titulado: "Lucrecia Borgia según documentos y correspondencia de su propio tiempo"
Lucrecia Borgia es, para la mayoría, un personaje fabricado por la rumorología que ya comenzó a fraguarse en su época, a caballo entre el Quattrocento y el Cinquecento. Sin embargo, aunque algunos literatos y cineastas han preferido abundar en ello al punto de preferir el personaje inventado, lo cierto es que podemos afirmar que la realidad supera a la ficción, de ahí que de todos los papeles asignados a la figura de Lucrecia Borgia el suyo verdadero resulte el de mayor interés, pues la vincula con el pensamiento de Los Fieles de Amor, es decir, con Dante, Petrarca, Boccacio y Pietro Bembo, entre otros.
Pietro Bembo descubrirá que esta madonnacon fama de mujer fatal, es en realidad una linda joven, de figura delicada y pelo rubio como el oro y una forma atractiva en el vestir, siguiendo la moda española. En definitiva una bella mujer que adornaba su persona con cintas en el pelo y modales refinados. Y en especial lo que en ella resalta es su fina inteligencia, algo que para Bembo no es sino la causa de aquel sutil reflejo en su semblante. Lucrecia se desveló ante todos como una mujer excepcional, cuya preparación se ponía de manifiesto al abordar cualquier tema y en el diálogo en general. Quienes la escuchaban decían que hablaba de los temas “con mucha seriedad y sabiendo de lo que hablaba”. Bembo descubre que Lucrecia está avezada en la lectura de Dante, Petrarca, Bruni, Cicerón, entre otros. Y que con ella es posible emplear el lenguaje secreto de los símbolosdel amor y la virtud, tal y como lo entiende la Filosofía Platónica.
Gli Asolanni, “Los Asolanos” o “Las Gentes de Asol”, es el libro que Pietro Bembo dedica a Lucrecia Borgia de Este, y donde mejor podemos acercarnos al pensamiento que los unió. Bembo frecuentó la amistad de Lucrecia durante todo el tiempo que éste pasó estudiando en la famosa Universidad de Ferrara, que en esa época era un centro cultural de primer orden.(...)
Los Asolanos es el libro que rescata el pensamiento de Petrarca. Se trata de una composición literaria que bien podría ser considerado un juego de inteligencia hecho para razonar. Y aunque estos juegos mnemotécnicos estaban divulgados entre los nobles, no todos participaban en el mismo nivel de ellos ni con la misma claridad, pues lo que para unos podía ser un juego dialéctico, relacionado con la habilidad en el discurso, para otros era un juego de ideas con el que se construían y embellecían las estancias del palacio interior. Precisamente Bembo le escribe a Lucrecia respecto a esto, que ojala las ideas en él expresadas la hagan aún más bella.
Bembo entrega a Lucrecia Borgia su libro “Los Asolanos” con una carta, donde le habla con total confianza explicándole cual es su estado de ánimo, los sinsabores que le ha dado la vida y el modo cómo los va superando. Es decir que para nada es la típica carta protocolaria escrita a un benefactor, como era tan habitual hacer en esta época, sino que en ella, como un amigo, retoma una conversación que ambos dejaron pendiente en Ferrara un año atrás. Seguramente en la casa de los Strozzi. Copio aquí un extracto largo, no sólo porque es un estupendo documento, sino porque en realidad constituye una excelente introducción al libro de Bembo. Sin duda la obra capital del movimiento petrarquista,
Sin duda un escenario muy bien escogido por Pietro Bembo al tratarse de una isla convertida en el último bastión contra la invasión turca, que después de 1489 en que la República de Venecia se hace con su gobierno, su reina, viuda, mantiene de forma independiente su Corte de régimen monárquico dentro de dicha República. Es decir que a pesar de las presiones mantuvo su propia política basada en los principios defendidos por Dante en la Monarquía y por supuesto por Platón en El Filósofo, que son los mismos por los que apostaron las Cortes italianas como modelo a seguir.
Tras la actuación de esta pareja de doncellas la reina, que naturalmente dirige los actos, llama a una tercera cantora. Esta se distingue sobremanera de las anteriores, pues su belleza es causa de admiración entre la concurrencia. Bembo se las arregla muy bien para hacernos evidente a todas luces, el salto de nivel que quiere establecer entre la nueva joven y las dos anteriores. Esta toma entonces una vihuela y comienza a entonar otra canción de amor. De su actuación nos dice Bembo que lo hace,
con tanta gracia y maneras de melodía tan nuevas que, en comparación de la dulce flama que sus notas en los corazones de los oyentes dejaron, las de las dos mozas cantoras parecieron carbones muertos y fríos.
Bembo, que no da puntada sin hilo, oculta en literalidad de su relato todo el simbolismo propio de los "Fieles de Amor", y por ello continua recordando el sentido de aquella reunión (...) Bembo utiliza a la perfección la dialéctica de la batalla, y un lenguaje donde se reconocen las raíces del teatro de Shakespeare. Dos puntos de vista diferentes enfrentados mediante la dialéctica de la reyerta. Esto es idéntico a los planteamientos expresados por las dos jóvenes cantoras que llegaron al banquete nupcial enlazadas de las manos, hasta que interviene la tercera de las doncellas allí reunidas, Lisa, quien dirigiéndose a Lavinelo, el tercer muchacho que ha permanecido en silencio durante la disputa de sus dos compañeros, le interpela para que entre la batalla dialéctica y defienda el Amor verdadero, no dual
Las escenas de este corto corresponden al primer acto de la
obra teatral "En el Útero del Cosmos", de Federico González Frías,
adaptación de un texto suyo anterior publicado bajo el título "En el
Vientre de la Ballena. Textos Alquímicos."
Sinopsis:
La representación transcurre en la sala de reuniones de una
facultad de letras donde un grupo de profesores han sido convocados para llevar
a cabo trabajos de experimentación sobre el lenguaje y la expresión verbal,
cuyo núcleo es inexpresable por su propia naturaleza metafísica. Se trata de
una nueva sesión de trabajo del Programa Agartha.
"'En el Útero del Cosmos es una comedia hiperrealista
de alcance subliminal, emparentada con el teatro de la memoria y el teatro del
absurdo. Aquel que mediante una trama sin un aparente significado y con unos
diálogos que no parecen seguir una secuencia dramática, va creando una
atmósfera que nos presenta el absurdo de lo convencional y simultáneamente nos
abre la puerta, a través de la poética y la magia, de lo 'real'”.
Este corto forma parte de la Serie que he titulado: TEATRO
HERMETICO DE LA MEMORIA, que está inspirada en el Teatro de la Memoria de
Federico González Frías.
Páginas con más información acerca de esta obra y sobre el
Teatro de la Memoria de Federico González Frías:
Descubrir espacios ciudadanos que de repente te sacan de un
lugar convencional para transportarte de inmediato a un tiempo y un escenario
insospechado, es lo que suele suceder cuando penetramos en un museo o en un
edificio o jardín histórico.
Lo que a este respecto sucede en la ciudad española de
Valladolid es, quizá, uno de los casos más insólitos ya que imprevistamente y
solo con traspasar una puerta, nos ubicamos en Japón.
Hablamos del asombroso museo vallisoletano donde,
efectivamente, una muestra permanente de objetos, considerados la más grande
colección de arte oriental de Europa, son expuestos en esta ciudad
castellano-leonesa, mostrándonos, a través de dicho arte (entre el siglo XVI al
XX), los modos y costumbres de esta cultura como son su caligrafía, pintura,
porcelana, lacas, bronces, escenas de jardines, de la ceremonia del té o formas
de expresar el teatro, el denominado "kabuki" y "noh", este
último considerado la tradición dramatúrgica viva más antigua del mundo.
El
Museo Oriental de Valladolid, ubicado en el interior del convento de los padres
filipinos de la Orden de los Agustinos, no es una excentricidad sino parte de la
historia de España dado que, los objetos que se exponen en él testimonian las
relaciones que existieron entre los más de 3.000 misioneros de esta Orden que
desde 1560 se desplazaron a Extremo Oriente, Filipinas, China y Japón para
comunicar el Evangelio, junto a otros españoles que también arribaron a esos
lares como comerciantes, exploradores y cronistas.Mª Ángeles Díaz
Imágenes. Serie Teatro Hermético de la Memoria.
Ver también: http://www.museo-oriental.es/ver_arte.asp?clave=19&loc=0