El Teatro de la Memoria de Cataluña y Aragón se ha estrenado en Barcelona como aporte de la Colegiata Marsilio Ficino con la obra En el Útero del Cosmos, de Federico González, que vivió muchos años en la ciudad condal, donde fundó –como posteriormente en Zaragoza– el Centro de Estudios de Simbología. Esta es una agrupación de filósofos herméticos dedicados al Arte Teatral y a sus representaciones, tanto civiles como mágicas y teúrgicas. Esta tarjeta de presentación es la síntesis de lo que hemos podido deducir de las palabras de Federico González, Margarita Batlle, Mireia Valls, Patricia Serdá, Antoni Guri, Carlos Alcolea, Marc García, Lucrecia Herrera, Francisco Ariza, Mª Angeles Díaz, Iñigo Correa, Ana Contreras, Pedro Abío, Beatriz Ramada, Juan Correa, María Victoria Espín, Ester Torrella, María Rosa Alorda, Concepción Roch, Adara Ariza, Daniel Ariza, Alvar Gracia y Dolors Tarragó.
Hemos recogido también algunas de las frases del fundador de este movimiento, que publicamos a continuación:
– El Teatro de la Memoria es también recordar el futuro.– El Teatro de la Memoria es vivir en un mundo otro.
– Recuérdate.
– Sin la memoria nada somos.
– No somos la memoria de desmemoriados.
– La esperanza es un fruto de la memoria.
– La memoria es la esperanza del último refugio y a la vez de la imperecedera certeza.
Con todo afecto: Núria
NUESTRAS ACTUACIONES SERÁN EN TODOS LOS TEATROS DEL MUNDO, PUEBLOS Y CIUDADES, Y EN TODOS LOS ESCENARIOS IMAGINADOS E IMAGINARIOS.
Querida Nuria, bien cierto, "sin la memoria nada somos", lamentablemente el hombre olvida su origen, olvida su fuente y se pierde en un "mundo actual, ficticio" sin bases. Olvida por ejemplo lo primordial, el hecho de ser parte de un planeta y formar un Todo con los demás seres vivos. Olvida y se auto-destruye al no saber quien es realmente y para qué está sobre este planeta.
ResponderBorrarAbrazos y felicidades con el "nuevo espacio grupal" y compartido, que ya visitaré con mucho agrado.
Gracias!
BeT, desde La Bitácora de Alchemy.
A propósito de la frase "sin la memoria nada somos" que comenta Bet, quisiera añadir que la memoria es la clave del movimiento perpétuo, es lo que permite asimismo identificar en qué momento del ciclo nos encontramos, y por tanto ubicarse en la rueda, en el cosmos. Todo este juego maravilloso que es la vida no es más que un perderse y reencontrarse, un olvido y un recuerdo. Solve et coagula. La caída por el olvido de nuestra verdadera identidad y su recuperación, o recuperación de la palabra perdida, es decir de la memoria del Ser.
ResponderBorrarQuiero igualmente expresar mi alegría ante esta iniciativa brillante, que se suma a todas aquellas emprendidas ya por este grupo con una seriedad y compromiso que se agradecen en estos momentos oscuros en que a casi nadie le interesa conocer la Verdad. Me sumo a los que han apostado por ello!
ResponderBorrarBrindemos!
Veo que a "alchemy" y "Ana", les ha llamado la atención lo mismo que a mí. Esa frase que lo encierra todo "Sin la memoria nada somos".
ResponderBorrarSería imposible actuar frente a la vida sin ninguna clase de experencia pasada. Perderiamos de vista, quienes somos, qué hacemos y hacia donde vamos...
Nuria, como siempre, feliz de verte por mi blog. Y tienes razón, no hay mejor reconocimiento para mi, que la visita y sobre todo, el comentario de mis lectores...
ResponderBorrarCon respecto de hacer una visita al Palacio de tu parte, si tu quieres y el tiempo me lo permite, no hay necesidad de que recortes el post, será un placer acompañarte y mostrártelo...
Saludos,
Oscar
Hola, Nuria. Ando por aquí de forma intermitente en esta temporada de verano.
ResponderBorrarAhora tres o cuatro días tan sólo.
Ya llegará septiembre...
Un beso!
Gracias por la participación y por vuestros matices sobre el tema de la Memoria.
ResponderBorrarVolviendo al asunto del post, el Teatro de la Memoria como sistema nemotécnico, me parece que otra frase interesante es esa que dice "no somos la memoria de los desmemoriados". Como sabéis, la memoria referida es la madre de las musas: Mnemosyne, fecundada por Zeus.
Dos de esas musas están relacionadas directamente con el Teatro de la Memoria: Thalía la comedia. Y Melpómene, la tragedia. O sea la vida misma.
Un abrazo a todos y cada uno: BeT, Ana, Oscar y Botón.
Se narra en un antiguo poema órfico que en la morada de Hades habían dos manantiales: uno fluía junto a un ciprés blanco y de éste, advertían los versos, no se debía beber. Sin embargo, se decía que era posible hallar otra fuente, aunque estaba vigilada por guardianes. Sus frescas aguas venían de otro lugar y a aquellos que la custodiaban había que decirles: "soy el hijo de la Tierra y del Cielo estrellado, y por esta razón mi linaje es celeste; vosotros ya lo sabéis. Estoy seco por la sed y me muero: dadme pues inmediatamente del agua fresca que mana de la laguna de la Memoria." Y este era el secreto que se aprendía para evitar las aguas del olvido y encontrar la vía a la inmortalidad.
ResponderBorrarNúria, suerte con todos vuestros proyectos y un fuerte abrazo.
Muchas gracias, querido Pola.
ResponderBorrarTodos estos proyectos son modos de difundir las ideas de la filosofía peremne y en ello cuenta por igual quienes las transmiten como los que las reciben, y comentarios como el tuyo son un testimonio de todo ello.
Un fuerte abrazo también para ti.
Nos parece extraordinario que haya surgido el tema de la Memoria en relación -directa o indirectamente- con el teatro de la memoria. Felicitaciones por sacar este tema fundamental en el hombre y de hecho, en la creación entera.
ResponderBorrarQuerida Núria:
ResponderBorrarQué bueno es poder darme una vuelta por tu (cada vez más) hermoso blog. Por diversas razones se me hace muy difícil ingresar, o tener la tranquilidad mental como para poder dejar algún comentario interesante... Pero debo confesarte que es una experiencia hermosa y enriquecedora cada vez que entro a leerte.
Respecto al Teatro de la Memoria, recuerdo que fue todo un descubrimiento leer el libro de Frances Yates "El arte de la memoria", y hace ya unos años se me había ocurrido utilizar al teatro y el arte de la memoria como soporte para el desarrollo de las potencialidades del ser... Pero, como varias cosas en mi vida, y también por diversas razones, el proyecto no se llevó a cabo. Sin embargo, siento hoy que algo de eso, por lo que cuentas, la Colegiata Marsilio Ficino es una especie de concreción de esa idea. Y me doy cuenta también de que las ideas no son exclusivas de nadie, sino que depende de cada uno de nosotros tomar contacto con ellas y reconocerlas, como si de númenes con vida propia se tratara.
Ojalá podamos estar en contacto más seguido.
Abrazos!
M.
Es una alegría recibir la noticia de esta nueva revista Fénix, a la que agradezco el haber hecho pública esta primicia en este espacio.
ResponderBorrarDe ella seguiremos hablando, ahora sin embargo puedo adelantar que se trata de una revista esotérica argentina, que estará dentro del anillo de Symbolos, a la que deseamos un largo y fructífero recorrido que desde aquí seguiremos con todo interés.
Querido Mahatma:
ResponderBorrarEs una alegría recibir la visita de los viejos camaradas en esto de la blogosfera, a los que una aprecia de manera especial.
Te comprendo respecto a lo de no poder dejar, a veces, un comentario interesante. Pues cada blog anda con su tema y no es fácil tener la concentración adecuada para responder a todos como se merecen, es decir estar en tantos frentes al mismo tiempo.
Por otra parte me alegra lo que me dices respecto al Teatro de la Memoria, y todo lo que en ti ha despertado. Veo lo interesante que es traer el tema a la actualidad, me refiero a hablar de esa energía vital que forma parte del hombre. Sabiendo que referirse a la Memoria no es sólo acordarse de ciertas cosas, como pueden hacer por otro lado los animales, sino recordarnos a nosotros, tomar conciencia de sí mismo. Ese saber es el que trae a primera línea del horizonte actual el Teatro de la Memoria.
Totalmente de acuerdo contigo en que las ideas no son de nadie, pero también estarás conmigo si digo que son unos y no otros quienes las tienen y las difunden de modo adecuado, y así llegan a todo aquel que, al final, lo que pretende es trabajar con esta revelación de corte sagrado.
Así dice uno de los personajes de la obra con la que ha dado inicio este movimiento que ha dado pie al post
“…este mundo nada tiene que ver con lo que nosotros imaginamos. Que estamos viajando constantemente en el tiempo y el espacio mientras pensamos en la casita propia. Que la vida entera es un código a descifrar. Que esa simbólica es Arquetípica. Que nosotros, como todas las cosas, somos signos y por lo tanto significantes. Que los sabios de todos los tiempos y lugares han conocido esta realidad. Que les ha sido revelada y es una sola y jamás podría ser propiedad de nadie….”
Por todo ello considero de todo interés seguir sacando a la palestra el tema de la
Memoria, este componente esencial del hombre y, claro está, me gustaría mucho seguir contando con tu participación y con tu experiencia, pues sabés la estima que te tengo.
Un abrazo.
N.
Nuria, en primer lugar agradecerte el paso por mi bloc, siempre es gratificante encontrarte por casa, y en segundo lugar un breve comentario; Todas las cosas que trascienden son buenas para mí, para ti y para todos, el resto es puro decorado.
ResponderBorrarUn fortísimo abrazo guapísima.
Querida Núria
ResponderBorrar¡Siempre sorpresas!...
Me parece extraordinario lo del Teatro de la Memoria. Como todos yo también quedé, digamos que bien informado sobre el Arte de la Memoria a través Frances A. Yates (en su libro titulado justamente: "El Arte de la Memoria"), donde esta historiadora de las ideas renacentistas habla de una construcción de madera llevada a cabo por Camillo, un autor consagrado al conocimiento de los códigos simbólicos (pitagóricos, neoplatónicos, herméticos y cabalísticos). Se trata, como se sabe, de una construcción utópica o ideal hecha en madera pero basada en los modelos los diseños de Vitruvio.
Esta pieza es, pues, un instrumento mnemotécnico, es decir que contiene tanto en sus medidas como en todo su diseño, conocimientos y claves para mantener viva la memoria sobre todos esos conocimientos simbólicos que son clave para entender ciertas cosas de la realidad.
Un abrazo
Querido Ismael:
ResponderBorrarGracias por el comentario, como siempre enriquecedor y amplio. Precisamente en el Blog de la Colegiata Marsilio Ficino, en el clarificador post:
http://colegiataficino.blogspot.com/2008/07/el-teatro-de-la-memoria.html
aparece una imagen de esa construcción nmotécnica de Giulio Camillo.
Aunque cualquier día BeT nos sorprende con una nueva.
Un abrazo para todos, amigos, y muy especial para Povorilla que hacía tiempo que no pasaba por aquí.